la maldición de roland garros

Dice Cacho Coria sobre Guillermo:

Me duele en el alma decir esto, pero en realidad quiero que abandone el tenis ya mismo.

No lo puedo ver así. No disfruta lo que hace, y para un padre no puede haber peor cosa que ver sufrir a un hijo. Por eso quiero que no juegue más. Obviamente que él tendrá la última palabra y la determinación final.

Yo creo que debe haber muchos factores, tenísticos y también extradeportivos. Sólo Dios o el Diablo saben qué le pasó. Pero cuesta entender cómo juega tan bien en los entrenamientos y luego, cuando entra en un torneo, decae notoriamente su nivel hasta perder contra jugadores que tienen muchísimas menos condiciones que él.

Regalar una final totalmente ganada en Roland Garros contra Gaudio fue un trago imposible de digerir. Pero creo que más todavía lo fue perder en la Copa Davis contra Eslovaquia, una serie por demás ganable. Esos dos puntos fueron el comienzo de la declinación de mi hijo en este deporte, que parece, hoy por hoy, no tener fin.

unas palabras de gastón

Estoy jugando mal yo, eso es lo más importante. No estoy de muy buen ánimo. Ya hace un año que estoy así y hoy por hoy no sé si tengo ganas de seguir luchándola para obtener estos resultados.

Mis cosas no están bien. Estoy en una etapa difícil.

Buenos Aires voy a jugar. Quiero divertirme un poco aunque sea, porque no la estoy pasando bien. No estoy jugando para divertirme, no importa si ganás o perdés. Pero hoy jugando así ni siquiera disfruto.

El nivel es un desastre. Es la verdad. No sé qué es. La verdad es que por ahí la cabeza no quiere más. Después de 20 años jugando al tenis, capaz que la cabeza no me da para más. No tengo la fuerza que tenía cuando era más chico.

Hice la pretemporada como nunca, para ver si este año cambiaba un poco. Voy a jugar Viña del Mar, Buenos Aires y después veo... Pero ojo, si yo la paso como me gusta pasarla dentro de la cancha. Si me divierto y juego bien, puede ser que siga.

el palo

Hoy puse en el mp3 un viejo disco de Los 7 Delfines -Nada Memorable- que no escuchaba casi desde que salió, hace 15 años, y pensaba en lo siguiente:
1) ¡cuánto me gustaba la banda! ¡y qué buen disco, un gran tema tras otro!
2) ¿qué será de la vida de Ricky Sáenz Paz, en ese entonces bajista de L7D, persona adorable y mi profe de stick?
3) ¿cómo carajo ocurrió que me deshice de dicho instrumento?
E inevitablemente me dieron ganas de tocar nuevamente el palo.

Ya se me van a pasar.

Por lo demás, la banda sigue igual: cargándose a full de actitud Gastón Gaudio en las más absolutas inactividad kinética e inquietud mental. Como debe ser.

agg en compostela

Mientras algunos integrantes descansan de su vida profesional, parte de AGG ensaya en O Baixo, sala montada para dicho propósito.
Angus se anima a la batería y Medioc prueba con el bajo.

yastá, lo dije

A pesar de que no la necesitaba, se me acaba de ocurrir la excusa perfecta para escaparme un par de días a Uruguay.

¿Quién se prende?

así estamos

El año del gato empezó a full. Ahora que la sala de ensayos está operativa, los gaudios Angus y Medioc se van bien lejos, a miles de kilómetros, a atragantarse con uvas bajo un frío de cagarse; Poleta -la diva inalcanzable- se agarra unas anginas que la obligan a un silencio que la hace aparecer aún más inalcanzable, como si ello fuera posible; mientras que Cuti calienta sus cuerdas vocales en otra fecha del Campeonato Intergaláctico de Karaoke, entonando bonitas páginas que van desde Juanes hasta Billy Joel. (Nótese la keyword de este relato, "garganta"). En cambio, y en silencio, Crimi, el quinto gaudio, trata infructuosamente de esconder cómo le sonríe el culo, veinte vueltas le da la sonrisa mire vea.

Si esto no es auténtica actitud Gastón Gaudio, entonces yo soy Ketty de Pirolo. Y ahora, chicus, los dejo, me esperan a desayunar en La Moncloa. Chauchis!